Afterlife Cp: # 1

Amable y distinguido lector, ponga atención, puesto que es muy probable que esta historia no tenga nada que ver con ninguna otra historia que pudiese haber sido contada antes o después; asómbres de lo que sus privilegiados ojos estan a punto de leer...

Era una fiesta muy alegre, aunque muchos no la recuerden; todo ocurrió en el hermoso palacio del Marquéz Antonio Van Lerwitz; que se casaba ese mismo día; un jóven de estatura promedio estaba paseándose sin rumbo por los invitados, vestía una gabardina café muy elegante con un moño en su camisa; saludaba a el resto de los invitados sin siquiera mirarlos a los ojos hasta llegar a una mesa donde se encontraba su prometida.

Al fondo tocaba la orquesta una pieza de Tango de Astor Piazzola llamada Libertango; los invitados bailaban, mientrás la condesa bailaba con su esposo; el jóven se dirigía al baño, había bebido más de la cuenta de repente se detuvo y se dijo a sí mismo: "hmmm... ¿Porqué no?"; tomó el bebé que estaba en una carriola alado de su mesa y se hecho a correr; nadie se dió cuenta de lo que pasaba hasta después que abandonó el lugar y el tipo que cumplia la función de "Ballet parking" se le ocurrió decirle: "Buenas Noches"; nadie comprendía como alguién podía salir de aquella fiesta de tan bonito ambiente que se había generado, al voltear a verlo se dieron cuenta de que traía algo en sus brazos, alguién más grito: "¡Es un Bebé!" y todos comenzaron a correr detrás de él...

Unos 15 billones de años más tarde, en un lugar exagerada y pasmantemente lejano a este se encontraba una muchacha.

Amanda Ripley era una chica de 19 años, estudiando una carrera en Literatura y letras, con muchos de sus amigos; incluso un novio llamado Ryan Mckensey, con el cual peleaba todo el tiempo, lo cual implicaba que regresara con el casi la misma cantidad de tiempo. Ella entraba en la categoría de: "normal", y lo siguió siendo por lo que resta de su vida, se trata de su entorno, el que comenzó a cambiar.

En ese momento Amanda se encontraba dibujando en la biblioteca, puesto que no tenía otra cosa más importante que hacer, la acompañaban sus amigas Megan y Amelia, que probablemente se encontraban perdiendo el tiempo de la misma manera, Amanda era estudiante de Filosofía y Letras en la facultad de Hearsanlors, deseando convertirse en una brillante escritora cuando tuviera la "experiencia suficiente", le encantaba crear lugares y personajes que según ella eran imposibles de concebir, pero recientemente andaba un poco corta de inspiración, esto más que nada se debía a un proceso extraño por la cual pasan la mayoría de los seres humanos llamado: "madurez", que se denota por una escacez de creatividad, y donde uno comienza a preocuparse por cosas más estúpidas que cuando era más pequeño.

Aparentemente Amanda y sus amigas debían estarse preparando para cierto examén, pero visto de otro modo, las tres ya estaban listas para él, después de haberse pasado las noches de los últimos tres días estudiando, lo mejor para este momento era simplemente relajarse.